El boom de los espacios de coworking alrededor del mundo
es algo que no ha pasado desapercibido. Se calcula que existen cerca de
1.000 espacios de coworking en España, concentrados en Madrid
y Barcelona habitados por la figura del autónomo.
Estos espacios permiten una opción flexible de trabajo para los emprendedores,
ofreciendo un sitio en el que trabajar con todos los servicios necesarios para la
jornada de trabajo.
Además, estos sitios ofrecen una oportunidad para compartir y conocer
proyectos y personas interesantes que también se encuentran trabajando
en el mismo sitio.

¿Qué es un espacio de coworking?

El concepto de la palabra coworking nace de la unión entre collaborative
y working, es decir, es un espacio en el que se ofrece una serie de servicios relacionados
con las oficinas al mismo tiempo que se crea una comunidad entre sus
trabajadores.
Este tipo de oficina nace trece años atrás cuando un hombre llamado Brad Neuberg
decide lanzar un proyecto en San Francisco que le permitiera trabajar por su
cuenta de forma autónoma pero manteniendo una estructura de trabajo dónde poder
interaccionar con otras personas del entorno.
Este espacio empezó contando con varias mesas de trabajo, wifi gratuito y zonas
de descanso y meditación. El éxito que le ha precedido es innegable y a día de hoy
es una de las alternativas favoritas de los autónomos.
¿Qué servicios ofrece un coworking?

Las bases que crea Neuberg en su primer espacio de coworking son similares a las
que se mantienen a día de hoy. Los elementos principales que tiene que tener un
sitio como este es conexión a wifi y lugar en el
trabajar. Una vez abarcadas estas bases, cada coworking es capaz de
ofrecer lo que necesiten sus trabajadores.
Estos servicios suelen ir desde servicios físicos necesarios para el sitio como
cafetería, zona de descanso, salas de reuniones con y sin equipamiento
audiovisual, espacios dedicados para talleres, taquillas o servicios de
impresión.
Pero además también pueden ofrecer servicios enfocados a la persona. Muchos
coworking tienen colaboraciones con marcas para conseguir descuentos exclusivos
para sus coworkers relacionado con todos los ámbitos de vida, desde su trabajo
hasta el colchón de casa.
Un servicio muy interesante para los negocios que deciden apostar por estos
espacios son los servicios de almacenamiento. Con un precio menor, se pueden
alquilar trasteros para almacenar todo lo que no necesitas en
el día a día de la empresa o el hogar y poder disfrutar del sitio libre.
Tipos de espacio de coworking

Una de las principales razones por la que se elige esta opción de trabajo
frente a oficinas tradicionales es el coste menor de estos espacios al mes.
Es un lugar pensado para aquellos que trabajan de forma independiente y
buscan un sitio dónde poder trabajar cómodamente sin estar en casa.
Existen principalmente dos tipos de espacio de coworking:
Coworking Flexible
Estos espacios se definen por ser un encuentro de trabajo para aquellos que no
pueden trabajar fijo en un lugar determinado por mucho tiempo. Pueden ofrecer
todos los servicios necesarios para poder trabajar: conexión a wifi, mesas de
trabajo, zonas de descanso, incluso espacios de reuniones. El objetivo es crear
un sitio físico dónde poder trabajar eficientemente sin importar dónde se
esté.
Algunos de los profesionales que utilizan estos espacios son autónomos con
un modelo híbrido
de trabajo, empresarios de viaje o
nómadas digitales.
Coworking Fijo
A diferencia de los coworking flexibles, en este tipo de espacio se necesita
alquilar un puesto fijo para poder disfrutar de sus beneficios. La ventajas
frente a un puesto flexible es la posibilidad de poder almacenar y organizar
los materiales necesarios para el trabajo. El objetivo de estos sitios es poder
ofrecer un lugar dónde trabajar compartiendo un ambiente agradable con otros
coworkers y sus proyectos.